Acta 05 de Noviembre de 2011

Avance sobre La tercera

Lacan viene refiriéndose a esta Tercera para continuar diciendo:

“La primera, pues, la que vuelve para que no cese de escribirse, necesaria, la primera, “Función y campo…”, en ella dije lo que había que decir. La interpretación, dije, no es interpretación de sentido, sino juego con el equívoco. Por eso puse el acento sobre el significante en la lengua. Lo designé con la instancia de la letra, y esto para darme a entender a vuestro poco de estoicismo. Resulta de ello, añadí desde aquel entonces sin mayor efecto, que la interpretación obra con lalengua, lo cual no impide que el inconciente esté estructurado como un lenguaje, uno de esos lenguajes que los lingüistas, justamente, como les corresponde, se empeñan en hacernos creer que animan lalengua. Suelen llamarlo gramatica o forma cuando es Hjelmslev. “

Retoma el texto con el que inaugura su enseñanza propiamente dicha para indicar que ya en ese momento con la introducción del significante abre la vía a la interpretación por medio del equívoco, subrayando fuertemente que no se trata de añadir sentido.
Recordamos  cómo Lacan pone en cuestión en signo lingüístico de Saussure. El equívoco será, entonces, sostenido por Lacan hasta su último seminario. Un equívoco que implica al sujeto, que lo interpela. Como dijimos no es buscar un nuevo sentido sino el sinsentido a partir del sentido, y el juego sentido-sin sentido nos lleva al paso de sentido. Se trata de un sentido inestable que la escucha del analista hace que caiga, y se abra a una nueva vía.
El nivel novedoso que agrega en este párrafo implica también a “lalengua” indicando que la interpretación la incluye. Los dos niveles que conviven y no se excluyen son: el inconciente estructurado como un lenguaje y lalengua. Freud en “El chiste y su relación con el inconciente” propone que el juego vocálico del niño que le brinda el placer del laleo, queda limitado por la imposición del adulto en función del sentido y la gramática.
Tenemos a Lacan leyéndose a sí mismo, desde la Tercera vuelve a su “Función y campo…” y recuerda también su “Instancia de la letra…” para hacer convivir estos dos niveles:


Función y Campo de la palabra: tenemos la palabra y el lenguaje, el lenguaje como mudo y la palabra como subjetivante. Se propone un paralelismo entre
1- la función de la palabra y el campo del lenguaje
2- la función del significante y el campo de lalengua

También se puede pensar cómo en un primer nivel tenemos  con palabra vacía y significante los niveles imaginario y simbólico y vía lalengua se introduciría el registro de lo real.
El lugar del significante en la lengua es la instancia de la letra. Lalengua a través de la letra permite la posibilidad de la equivocación.

Recordemos la definición que hace Lacan de la letra en la “Instancia de la letra…” : “Designamos como letra ese soporte material que el discurso concreto toma del lenguaje”
Sabemos que algo que homófonicamente suene de idéntica manera puede tener escrituras distintas. Es por ello que la letra pareciera tener que ver con una operación de lectura.

La instancia de la letra, ¿Qué es? (pregunta Daniel): es el juego de palabras, donde los sonidos y las letras se van intercalando. La letra sería ese lugar extraño que hace que un significante en el inconciente estructurado como un lenguaje se deslice hacia otro lugar para decir algo distinto y se produzca el equívoco. Lalengua es lalengua del equívoco, la que propicia la posibilidad de la equivocación.
Se ubica el párrafo donde Lacan produce el equívoco que da lugar al concepto: lalangue, en Conferencias en Sante Anne. En lugar de decir Lalande, nombre del diccionario, dice Lalangue.

Se subraya una idea: “El inconciente tiene que ver ante todo con la gramatica”  
La gramática como gramática de la pulsión. Grama: en su uso antiguo, significa rajadura que no tiene tinta, arañadura, aparece en el Cratilo de Platón.

A partir de esto resulta interesante avanzar con la propuesta de Lacan en el párrafo siguiente de La tercera:

“En francés, lalengua es la que permite considerar que no es mera casualidad que voeu, anhelo, suene como veut, quiere, de vouloir, querer, tercera persona del presente del indicativo; que non, el no que niega, y nom, el nombre que nombra, tampoco suenan igual por casualidad; que d’eux, de ellos, esté hecho de la misma manera que deux, dos, no es pura casualidad ni tampoco arbitrario como dice Saussure. Lo que se ha de concebir en ello es el depósito, el aluvión, la petrificación que deja marcado en ella el manejo por parte de un grupo de su experiencia inconciente.
De la lengua no se debe decir que es lengua viva porque esté en uso. Es más bien la muerte del signo lo que acarrea. No porque el inconciente esté estructurado como un lenguaje, deja lalengua de tener que jugar contra su gozo, puesto que está hecha de ese mismo gozo. En la transferencia, el analista es el sujeto supuesto al saber, y no es errado suponerlo si él sabe en qué consiste el inconciente por ser un saber que se articula con lalengua, no anudándose a él el cuerpo que allí habla sino por lo real con que se goza”

Surge la pregunta por el depósito, el aluvión, la petrificación. Se llega a la idea del uso que se hace de la lengua en un grupo. Se propone la diferencia entre los tres términos, surge la idea del depósito como el sedimento de un aluvión.
Lalengua implica la muerte del signo. Lacan recupera los títulos de sus escritos para hacerles decir más de lo que decían en su momento. El signo es la muerte de la cosa, pero ahora incluye lalengua para horadar al signo.
Además de jugar con las palabras, la emisión del hablar de ese ser hablante lo hace una boca, una lengua, un cuerpo, ese sonido está emitido desde un cuerpo. No es un puro bla bla, es es cuerpo que es tocado por eso que dice, sin saber lo que dice.
Que la lengua vehicule la muerte del signo, es decir, lo rompe en su función de significación siendo que el signo es lo que representa a algo para alguien.  Se rompe la idea de representación.

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